EL MAR DE LEVA (Joropo)

Letra y música: Eduardo Rosero Pantoja

Hecho con los motivos del pensador Fernando Santacruz Caicedo

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El mar de leva, va sacando la inmundicia,

de la profundidad; el nuevo virus, 

reveló la corrupción,

la que ha crecido, sin tregua en la nación.

Todo es un caos, reina la putrefacción, 

un reyezuelo, luce en la televisión.

Ese payaso desgobierna, legisla, hace de juez,

pero lo manda un recluso, de una vez.

En el Congreso, sus secuaces dicen sí,

a sus proyectos, que se comen con ají.

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Ese Congreso, lo integran unos momios,

unos autistas, que dirige el demonio;

roban al ruedo y su ideal supremo,

es cargar con la hacienda, que es del pueblo.

Los magistrados, es claro, que no todos,

son inmorales, son rábulas venales.

Procurador, fiscal y contralor,

los tres se venden, al mejor postor.

                            3

El que gobierna es el Centro Demoniático,

que está exigiendo Asamblea Constituyente,

quiere enterrar, el Acuerdo’ e Cartagena,

para volver a la guerra y a la pena.

Son los ministros, unas hienas insaciables,

giran en torno, a negocios, en pandemia.

De los milicos, de sus mandos, no me hablen, 

pues su rabo es de paja, ya se sabe.

                             4

Y los bancos, se llevan los billones,

que les gira el gobierno, en derroche,

nunca va ese dinero a los pobres,

pero siempre a los todopoderosos.

                             5

Y las tiendas, de grandes superficies,

patrocinan piñatas, sin impuestos

y se llenan de plata los bolsillos

y expanden el virus, a los nuestros. 

El gobierno, en la rifa de recursos,

naturales, oceánicos y otros;

a los gringos y árabes el oro

y el espectro magnético, un tesoro.

                             6

Contratistas, se roban el erario

y el gobierno se endeuda, a cada rato,

él no invierte en salud, ni educación,

mas sí compra, en armas, un montón.

No hay empleo, ni vivienda para el pueblo,

no hay salud, en la villa ni en la aldea,

pero eso no interesa al gobernante,

quien tiene, de un bobo, el talante.

                             7

Los campesinos, trabajan sin descanso

y nos llenan las plazas y las panzas.

Los únicos héroes de Colombia,

a quienes debemos, toda honra.

Cuando acabe la pandemia, habrá acciones,

de la gente organizada y con cojones,

de cambiar el sistema imperante,

para hacer, con justicia, patria grande.

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