UNA ACLARACIÓN (Joropo)

Letra y música: Eduardo Rosero Pantoja

Homenaje al campesino colombiano y a sus luchas de 2013

Las frutas y verduras

no vienen de la tienda,

vienen todas del campo,

la finca o la hacienda.

Tampoco los tubérculos,

los bulbos y cereales,

no crecen en la tienda

ni en bello supermárket.

Brotan de las semillas,

que echa el campesino,

en tierra de labranza,

bajo el sol matutino.

Él se unta de la tierra

que va a dar a sus uñas,

en tanto el citadino,

apenas se rasguña.

Las papas, las cebollas,

el ajo y zanahoria,

la yuca y el banano,

son parte de esa historia.

El campesino nuestro

asoma antes que el sol,

por valles y sabanas,

empieza su labor.

Se va a ordeñar la vaca

y  alimentar gallinas,

dar de comer al perro

y  a  ver por su comida.

Madrugan las mujeres,

lo mismo que los hombres,

sirvientes no conocen,

fastídiales el nombre.

Es visto el campesino

como ser de segunda,

se viste con andrajos,

que deja don Facundo.

Y lo que más nos duele,

y esa es la paradoja,

que existan campesinos

sin tierra hasta ahora.

Mientras tanto la tierra

se entrega al extranjero,

para que extraiga el oro

y deje el reguero.

De muerte y de miseria,

como ocurrió en Condoto,

lo mismo en Barbacoas,

donde no alumbra un foco.

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